Viernes, 19 de julio 2019.
Por Luis Herasme
Barahona. Un ex oficial de la Policía, quien reside en Barahona, llora hoy con impotencia la muerte de su hijo la mañana de este viernes, a manos de un agente de la Institucion a la cual sirvió durante 30 años.
El señor Fermín Gómez Urbaez, dijo que cuando su hijo Antonio Gómez Cuevas, de 21 años de edad, huyó de la casa ante el asomo de las autoridades, debieron al menos dispararle a los pies y no matarlo.
Desconsolado, Gómez Urbaez dijo que le deja a Dios la muerte de su hijo y recordó que en sua 30 años en la Policía no cometió excesos contra los ciudadanos.
El señor Fermín Gómez Urbaez, dijo que cuando su hijo Antonio Gómez Cuevas, de 21 años de edad, huyó de la casa ante el asomo de las autoridades, debieron al menos dispararle a los pies y no matarlo.
Desconsolado, Gómez Urbaez dijo que le deja a Dios la muerte de su hijo y recordó que en sua 30 años en la Policía no cometió excesos contra los ciudadanos.
“Los hacía preso y los conducía al cuartel, porque el que hace las cosas malas hay que apresarlo”, dijo.
Explicó que su hijo estaba en prisión y fue puesto en libertad por una fianza de 5 mil pesos que pagó su mujer.
El joven fue abatido de cuatro disparos en el sector Camboya, de Barahona.
Según la Policía, Antonio Urbaéz falleció en un intercambio de disparos.
Era buscado bajo la acusación de atraco a mano armada y de robo de motocicletas.
Personas entraron a la morgue del hospital Jaime Mota y cargaron con el cadaver en una motocicleta, para velarlo en el sector La Raqueta, de Camboya, donde residía con sus padres y su mujer.
Datos tomados de la Lupa del Sur.
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