miércoles, agosto 29, 2012

Santos apuesta por gobierno progresista y una Colombia en Paz.


El presidente colombiano manifestó su deseo de acabar con el conflicto armado en Colombia y destacó que su administración trabajará con el propósito de lograr un país que sea reconocido por su justicia social y progreso, en vez de un espacio de guerra.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó en la ciudad caribeña de Barranquilla que prefiere buscar la paz a estimular la guerra en su país, luego de confirmar los acercamientos de paz que su Gobierno iniciará con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)

“Estoy seguro de que lograremos tener un Estado reformador, progresista y decente. Que quiere estimular la paz por encima de la guerra”, dijo Santos durante la instalación del octavo Conversatorio de la Jurisdicción Constitucional.

El mandatario dijo que el que preside "quiere ser un Gobierno progresista, que tenga siempre como norte, como objetivo, buscar más justicia social, cerrar las brechas, combatir la pobreza, sobre todo la pobreza extrema".

"El Gobierno que presido quiere ser un gobierno al que el pueblo colombiano y la comunidad internacional lo señalen como un gobierno decente, un gobierno que respeta las diferencias, un gobierno al que no le molesta la crítica sino que, por el contrario, la estimula", aseguró.

En una alocución al país, el pasado lunes, el presidente confirmó que su Gobierno y FARC llegaron a un acuerdo para formalizar la apertura de un proceso de paz.

El gobernante, que asumió en agosto de 2010, se propuso para la segunda mitad de su mandato avanzar hacia la paz con los grupos rebeldes de su país, que afronta un conflicto armado de casi medio siglo.

Este propósito del presidente Santos ha sido cuestionado por su antecesor, Álvaro Uribe (2002-2010), quien divulgó arremetió contra la política de defensa del Gobierno y le acusó de debilidad con la guerrilla.

En el país están activas las FARC y Ejército de Liberación Nacional (ELN), que en conjunto cuentan con unos 11 mil combatientes, según cálculos de las autoridades militares.

teleSUR-EFE-El Espectador/ao-PR